Tras nuestro paso por La Habana, habíamos elegido dar un cambio radical a nuestro viaje. Dejábamos la bulliciosa Habana para dirigirnos a una zona rural en busca de sus prometedores atractivos naturales.
El destino elegido era La Ciénaga de Zapata; tan sólo disponía de un correo electrónico y un teléfono de contacto con un conocido ornitólogo del lugar que amablemente me facilitó Antonio, al que conocí a través de su excelente blog https://naturalezayviajes.blogspot.com/ y con el que comparto bastantes aficiones.
El destino elegido era La Ciénaga de Zapata; tan sólo disponía de un correo electrónico y un teléfono de contacto con un conocido ornitólogo del lugar que amablemente me facilitó Antonio, al que conocí a través de su excelente blog https://naturalezayviajes.blogspot.com/ y con el que comparto bastantes aficiones.