Tras un agotador viaje llegamos al Awash Falls Lodge, en plena noche. Dos grandes avestruces que no se muestran nada amistosas, nos reciben apenas traspasar las puertas.
Tras el papeleo de rigor, dos trabajadores del hotel nos conducen hasta nuestras cabañas mientras esquivamos los ataques y carreras de las gigantescas aves. Dormiremos en dos grandes cabañas con capacidad para 4 y 5 personas.
Tras el papeleo de rigor, dos trabajadores del hotel nos conducen hasta nuestras cabañas mientras esquivamos los ataques y carreras de las gigantescas aves. Dormiremos en dos grandes cabañas con capacidad para 4 y 5 personas.