05 junio 2020

Auroras polares, las luces mágicas. Islandia.

 
Cuando decidimos elegir Islandia como nuestro próximo destino a visitar, todos teníamos una ilusión en común: ver auroras. 
Ninguno de los 6 integrantes del grupo habíamos experimentado antes, la posibilidad de ver las denominadas Northern Lights
Como habrá sucedido a muchos de los que ya han visitado este país, y con toda seguridad pasará a los que tienen en mente visitarlo próximamente, la tarea de estudiar este enigmático fenómeno se convirtió en una de mis prioridades. 
Fueron muchas las horas que dediqué a leer y tratar de averiguar cuales eran los mejores sitios y momentos para "cazarlas" pero tras mi paso por la isla me ha quedado claro que lo más importante es algo que se escapa a cualquier cálculo posible: la suerte.

 

que son las auroras
Cuando las explosiones solares alcanzan una determinada intensidad, las partículas cargadas de energía son arrastradas por los vientos solares hacia la atmósfera terrestre, donde son desvíadas hacia los polos donde los campos magnéticos son más débiles. El choque de estas partículas contra la atmósfera dan lugar a las auroras polares
Las que se producen en el polo norte reciben el nombre de auroras boreales mientras que las que tienen lugar en el polo sur recibirán el nombre de auroras australes. Son más famosas las auroras boreales porque en el norte hay más asentamientos humanos y son las más avistadas. 



cuando ver auroras
A la hora de informarme sobre las mejores fechas para avistar auroras, encontré disparidad de opiniones. Estaba claro que el verano quedaba descartado ya que en esas latitudes no llega a hacerse de noche, condición necesaria para poder verlas.
Pero una vez descartados los meses de Mayo a Agosto, encontré quien aseguraba que lo mejor era intentarlo en pleno invierno ( Diciembre- Febrero ) mientras otros hablaban de Setiembre-Octubre ó Marzo- Abril. 
Un dato que me llamó poderosamente la atención, fue que suelen producirse entre las 20 y las 2 de la noche



que es el kp
Leí mucho acerca del índice KP, muy útil para saber las probabilidades que tendrás de ver auroras dependiendo del valor que marque cada día. Este índice se mueve entre 0 y 9 y cuanto mayor sea éste, más probabilidades tendrás de verlas. 
No voy a entrar a explicar lo que refleja este índice porque imagino que no interesará demasiado a los que sólo pretenden buscar auroras pero sí diré cómo saber el KP diario. 
Esto es tan sencillo como bajar una simple aplicación a tu teléfono móvil. Hay numerosas aplicaciones aunque yo sólo te puedo hablar de la que usé: My Aurora forecast. 
Su uso es bastante sencillo y te hará una previsión a medio plazo que te puede resultar útil pero no desesperes si te muestra un índice bajo. Se puede equivocar, doy fe de ello. 



donde ver auroras
Si deseas ver auroras tendrás que acercarte a los polos. 
En el caso de las auroras boreales, los mejores destinos los encontrarás en Alaska, Canadá, Islandia, Noruega, Finlandia, Siberia, Suecia, etc, en las zonas ubicadas más al norte. 
En cuanto a las mejores zonas de Islandia, se decía que el norte es muy buena zona aunque se pueden ver a lo largo de todo el país. 
Eran muchos los que aseguraban que lo más importante era huir de la contaminación lumínica de las ciudades pero a la hora de fotografiarlas, considero que tener alguna luz de referencia le añade una nota interesante. 
Buscar un fondo bonito como puede ser una montaña, un lago, una cascada o incluso un pueblo iluminado, te va a proporcionar fotos mucho más atactivas que una hecha directamente al cielo, sin ninguna referencia externa. 



como fotografiar auroras
Es posible que si consigues ver tus primeras auroras, te lleves una pequeña decepción ya que aunque algunos aseguran haber disfrutado de todos sus colores a simple vista, no suele ser lo habitual. En general sólo verás unas extrañas nubes de color blanco que se mueven sin parar cambiando continuamente sus formas.
Necesitarás la ayuda de una cámara fotográfica para poder disfrutar plenamente de la amplia gama de colores que nuestros ojos no llegan a distinguir. 
Y para conseguirlo deberás tener un mínimo conocimiento de las técnicas a emplear. Si eres un fotógrafo consumado no tendrás ningún problema pero si eres de los que siempre disparas en automático, debes estudiar tu cámara para aprender a cambiar algunos parámetros. 
No te desanimes, merece la pena y no es difícil. 
Para empezar, es muy aconsejable llevar un trípode ya que jugaremos con tiempos de exposición largos. Por la misma razón, también es recomendable usar mando a distancia para disparar. Pero no desesperes si eres un novato y no dispones de todo ésto. Busca un apoyo sólido para tu cámara y pulsa el disparador suavemente. No sacarás fotos para el National Geographic pero te sorprenderá el resultado. 

Cada noche es distinta y deberemos probar distintos parámetros hasta que consigamos los resultados buscados. 
  • El enfoque deberá ser al infinito, al horizonte. 
  • Podemos comenzar con un iso de 800 e ir subiéndolo hasta 1600 o incluso más para ver los resultados. 
  • En cuanto a la apertura, utiliza la máxima que permita tu lente f2.8 o más si puedes. Cambia y prueba hasta encontrar la mejor opción. 
  • Y por último, comienza con 10-15 segundos de tiempo de exposición y vete aumentando hasta obtener el mejor resultado. Piensa que las auroras se mueven y siempre van a salir un poco movidas. 
Si no eres ningún experto o incluso no tienes ni zorra idea de fotografía, no te desanimes por no saber de qué hablo. 
Aprende tranquilamente en casa, cómo meter esos parámetros en tu cámara y haz alguna prueba de noche, aunque sea desde tu ventana. 
Te aseguro que si consigues ver auroras y consigues fotografiarlas, no te vas a arrepentir. 
Tan sólo añadiría dos cosas más: lleva ropa en abundancia y las baterías bien cargadas. 




mi experiencia
Pero una vez explicados los datos más técnicos mil veces repetidos, paso a relatar mi propia experiencia que considero bastante más interesante porque habla de realidades, dejando al margen tanta teoría. 
Nosotros viajamos en Setiembre, un mes que no era el más adecuado según muchos expertos pero en el que se decía que ya era posible verlas. 

Tras instalar en nuestro móvil la aplicación My Aurora Forecast y a un mes de nuestro viaje, advertimos que durante nuestra estancia íbamos a disfrutar de unos días con un KP muy alto. Las expectativas se disparaban. 
Todos estábamos muy ilusionados con la posibilidad de ver alguna aurora, aún más cuando ninguno de nosotros habíamos visto nunca ninguna. 
Pero durante nuestra primera semana en la isla, la ilusión se fue difuminando hasta casi desaparecer. 
El motivo no era otro que el pésimo tiempo que nos estaba acompañando y que nos había impedido ver el cielo despejado más allá de unos minutos un par de días. 
Con el cielo totalmente cubierto y casi siempre lloviendo por las noches, el objetivo de ver auroras se desvanecía noche tras noche. 

Cuando habíamos perdido toda esperanza ya que daba la sensación de que Islandia estaba siempre cubierta de nubes, descubrimos un puñado de estrellas en la oscuridad de una noche. 
Aquella misma noche, entre nubes y claros, disfrutamos de nuestras primeras auroras. 
Curiosamente, a pesar de haber leído largo y tendido acerca de este fenómeno, nunca imaginé que lo único que iba a ver eran unas extrañas nubes que se movían a gran velocidad. 
A pesar de la pequeña desilusión, no se puede decir que el espectáculo nos defraudara, más aún cuando comprobamos las imágenes que nos mostraban nuestras cámaras. 

Pero fue en nuestra cabaña cercana a Husavik, donde las luces bailarinas colmaron nuestras más altas expectativas. 
Estando preparando la cena, mi móvil dejó oir una alarma. La aplicación instalada para tal fin, me avisaba de una alta probabilidad de ver auroras en mi ubicación.
Curiosamente, las KP más intensas habían ya pasado aunque aún seguían siendo importantes. 
Tras cenar a toda velocidad, salimos al exterior de la cabaña y vimos una nube blanca en el horizonte, a la que inmediatamente sacamos una foto. 
Efectivamente, aquella nube blanca se revelaba verde en nuestras fotos. 
Durante más de media hora estuvimos sacando fotos a aquella nube que permanecía inmóvil en el cielo, sin que sucediera nada más destacable. 



De pronto, cambió de forma e intensidad y otra nube apareció a nuestra derecha...y otra más a la izquierda.... y muchas más de frente. En unos minutos, el cielo estaba repleto de nubes con una intensidad de luz increible. Corrían atravesando el cielo, cambiando de forma rápidamente para acabar desapareciendo, a la vez que otras surgían de la nada. 
El jardín se encontraba totalmente iluminado por la luz que desprendían las auroras e incluso llegamos a distinguir a simple vista, unos tenues colores verdosos y rosáceos que teñían el cielo. Aquello era maravilloso. 
El frío era intenso pero no podíamos dejar de mirar hacia arriba a pesar de que algunos estábamos en camiseta y pantalón corto. No queríamos perder ni un minuto entrando a casa para abrigarnos, estábamos totalmente hipnotizados por semejante espectáculo. 










Perdimos la noción del tiempo y aunque no puedo asegurarlo, creo que estuvimos alrededor de dos horas admirando aquella mágica obra celeste. Con las manos y los pies ateridos de frío, terminamos por entrar a la cabaña con la cara plena de felicidad, celebrando nuestra buena suerte. 
Fue éste el momento estelar en Islandia, en lo que a auroras se refiere y aunque todavía tuvimos ocasión de verlas otras tres noches más, la que siempre quedará grabada en nuestra memoria, será la de esta inolvidable jornada. 

Ahora, tras 16 días recorriendo Islandia, y siempre hablando desde nuestra experiencia, puedo asegurar que llegué a una conclusión que no por obvia, deja de ser determinante: 
" para ver auroras, lo más importante es que el cielo esté despejado. Todas las noches en las que hubo intervalos de claros, pudimos ver auroras aunque no todas tuvieron la misma intensidad."

capitulo anterior: Ballenas en Husavik, fumarolas de Hverir y Cascada de Godafoss
capitulo siguiente: Ballenas de Husavik. Especies y características

No hay comentarios: