Mi viaje a India. En busca de tigres y leopardos.

Por tercera vez a lo largo de mi vida, me desplazaba hasta la mística India en busca de sus tesoros naturales más preciados.

Al igual que durante mi primera visita, el viaje tendría como principal objetivo, visitar alguno de sus parques nacionales pero añadiendo un nuevo reto que no sería otro que acercarnos hasta el Himalaya para tratar de descubrir al leopardo de las nieves.

Pero ya hablé de ésto en el anterior post por lo que ahora pasaré a hacer un pequeño resumen de lo que fue mi viaje por el país asiático.

Lo primero que diré es que en esta ocasión, no viajaré por mi cuenta como hago habitualmente en mis viajes ya que dejamos todo en manos de una agencia naturalista india: Nature Safati India

Ellos fueron los encargados de organizar y reservar alojamientos, traslados, safaris y vuelos internos.

Nosotros sólo nos encargaríamos de reservar los vuelos internacionales y gestionar la visa.

Debemos decir que tanto la organización del viaje como los alojamientos y la cualificación de nuestros guías en los distintos parques, estuvieron a la altura de lo esperado.

Aún así, el viaje no estuvo exento de algunas incidencias que empañaron un poco nuestro buen sabor de boca y que pasaré a detallar más adelante. El desamparo, la incertidumbre y los serios inconvenientes que sufrimos al final del viaje, será algo que tendremos que reclamar a la compañía aérea Lufthansa tratando de conseguir la compensación por los daños causados.

Pero no sólo el final del viaje resultó accidentado sino que los problemas comenzaron a nuestra llegada a India...

EL VISADO

Si deseas hacer el visado de entrada a India por tu cuenta, deberás hacerlo en esta web:India Visa Online (indianvisaonline.gov.in).

Tómatelo con calma y prepárate para un engorroso trámite en el que deberás hacer frente a un montón de cuestiones totalmente intrascendentes en muchos casos.

De cualquier forma, te diría que extremes tu atención a la hora de rellenar tu nombre, apellidos, número de pasaporte y fecha de llegada al país.

IMPORTANTE: ten en cuenta que desde el día que solicitas el visado, dispondrás de un mes para entrar al país. Puedes entrar antes pero no después de esa fecha.

Y comento ésto porque yo salía de Bilbao el 2 de febrero a las 6,50 A.M . Sin prestar demasiada atención, di por seguro que llegaba ese día a Delhi por lo que el día 3 de enero, ansioso por dar por resuelto este pesado trámite, decidí solicitar la Visa. Al día siguiente recibí el correo que me confirmaba que el visado estaba listo y ya sólo me quedaba imprimirlo. Otro asunto resuelto...

Pero lo cierto es que repasando los datos del visado, me di cuenta de que expiraba el día 2 de febrero y me surgió la duda de la hora de llegada. Efectivamente, cuando consulté los vuelos vi que la hora prevista de llegada a Delhi era las 0,15 del DIA 3!!!

De inmediato envié un correo para pedir corregir el dato o hacer otra solicitud. La respuesta fue que no se podía corregir nada y que no podía solicitar otro visado hasta que expirara el que ya tenía.

Bien empezamos...

PREPARATIVOS Y EQUIPAJE

Aunque lo cierto es que la organización del viaje iba a correr a cargo de la agencia contratada, siempre quedan asuntos que solucionar como pueden ser seguros, vuelos internacionales, visado, dinero, equipaje, equipos fotográficos y ópticos, etc, etc.

Tras conseguir el visado y reservar vuelos y seguros, comenzamos a plantearnos el equipaje a llevar. No iba a resultar sencillo ya que el viaje estaba totalmente diferenciado en dos etapas: la primera en una zona templada-cálida y la segunda, en una zona de frío extremo. Habría que llevar ropa de todo tipo, lo que unido a equipos fotográficos y telescopios, conformarían un equipaje importante y pesado.

El plan era llegar a Delhi y de allí desplazarnos hasta el centro del país para visitar los parques de Pench y Kanha. Una vez visitados estos dos parques volveríamos a Delhi para volar a Ladakh, al norte de la India en busca del leopardo de las nieves.

Pronto se nos ocurrió la idea de repartir los equipajes en dos maletas diferentes. En una iría lo de verano y en otra lo de invierno.

Y lo mejor sería dejar lo de invierno en Delhi, durante la primera etapa del viaje, para luego hacer lo contrario, antes de iniciar la segunda etapa. De esta forma, sólo llevaremos encima lo necesario en cada zona.

Evidentemente, el equipaje más pesado será el de la segunda etapa ya que deberemos llevar ropa de abrigo entre la que no faltarán gorros, guantes, ropa térmica, botas de montaña, polares y por supuesto, una buena chamarra capaz de aislarte de temperaturas que podrían llegar a los -20ºC. Unas plantillas que desprenden calor al pisarlas, fueron de gran ayuda para mantener los pies calientes.

Con los vuelos a India reservados, el pasaporte y visado listos y el equipaje preparado, sólo quedaba esperar que llegara el día señalado...

DELHI

Nuestro paso por Delhi, sería testimonial y un mero trámite antes de salir hacia los destinos principales de nuestro viaje.

Nos alojamos en el Holiday Inn New Delhi International Airport, muy cercano al aeropuerto. Nos sorprendieron las estrictas normas de seguridad para acceder a los hoteles de esta zona conocida como aerocity.

Nos limitamos a dar un paseo por un parque cercano y cambiar un poco de dinero durante el día que permanecimos allí, antes de partir hacia el Parque de Pench.

Holiday Inn

PENCH

De Delhi volamos a Nagpur donde nos esperaban para llevarnos por carretera hasta nuestro hotel, el Tuli Tiger Corridor.

Durante tres días recorrimos las pistas del parque en busca de su fauna, especialmente sus esquivos gatos: leopardos y tigres.

Un acogedor alojamiento y sus atentos empleados contribuyeron a que nuestra estancia fuera totalmente gratificante.

Tampoco nos olvidaremos de nuestro guía, Mahesh Gop, perfecto conocedor de la fauna y el terreno por donde nos movimos.

Tuli Tiger Corridor

KANHA

Llegamos a Kanha procedentes de Pench tras recorrer unos 200kms por carretera. Algo más de 5 horas nos llevó recorrer esa distancia hasta llegar al Kanha Jungle Camp donde pasaremos otras tres noches.

De nuevo nos dedicamos a recorrer las polvorientas pistas del parque buscando su fauna durante gran parte del día.

Al igual que en Pench, el buen trato recibido y las comodidades del hotel, contribuyeron a que nuestro paso por el Kanha Jungle Camp fuera del todo satisfactorio.

Nuestro guía naturalista en Kanha, Naren Malik, también demostró su amplio conocimiento del terreno por el que se movía así como de la fauna y sus hábitos.

Kanha Jungle Camp

LEH

De Khana, nos desplazamos hasta el aeropuerto de Raipur por carretera para tomar un vuelo a Delhi donde, tras pasar otra noche en el Holiday Inn New Delhi International Airport, tomamos un vuelo a Leh, capital del estado de Ladakh.

Apenas a una hora de vuelo de Delhi, Leh tiene poco que ver con el resto de la India. Un icreible paisaje de montañas nevadas nos recibió a nuestra llegada al aeropuerto.

Durante dos noches nos alojamos en el hotel Chospa para aclimatarnos a la altitud antes de subir otros 500-600 metros hasta una remota aldea llamada Uley.

Nos encontramos a más de 3500 metros y la adaptación a estas alturas no resultó sencilla. No era la primera vez que me encontraba a estas altitudes pero en esta ocasión los efectos se dejaron sentir con más dureza.

Dedicamos nuestro tiempo a pasear por las calles de Leh, visitar algún monasterio y alguna otra visitilla por los alrededores.

Si bien en todos los hoteles recibimos un gran trato, la responsable del hotel Chospa nos hizo sentirnos como en casa. No pudo portarse mejor con nosotros...

Leh

ULLEY

Menos de 80kms separan Leh de Ulley, a lo largo de los cuales ascenderemos otros 600 metros hasta llegar a los 4200 aproximadamente.

Ulley es una pequeña aldea donde apenas viven unas pocas familias. La fama alcanzada por este enclave ubicado en el valle del mismo nombre, ha provocado que cuente con varios alojamientos para todos los que hasta allí acuden en busca del leopardo de las nieves.

Nosotros nos alojamos en un sencillo homestay, " Himalayan Homestay" donde también pasamos una semana inolvidable aunque no gozamos de todas las comodidades anteriores.

Varios rastreadores salen todos los días buscando el rastro o la presencia de leopardos en las montañas cercanas. En caso de avistar algún ejemplar, avisan por walkie-talkie para que los turistas se acerquen a la zona.

Durante una semana buscamos los gatitos desde nuestro alojamiento y desplazándonos a los valles cercanos hasta los puntos de avistamientos más habituales.

Pero no sólo se pueden ver leopardos de las nieves; el Bharal, la Cabra montés, el Argali tibetano, el Ladakh urial, el lobo tibetano, el zorro, etc, etc se pueden ver también en esta zona.

Ulley

DATOS DE INTERES

CLIMATOLOGIA

A pesar de que nuestro viaje tuvo lugar en el mes de febrero, en los parques de Pench y Kanha tuvimos muy buenas temperaturas a excepción de las primeras horas de la mañana, cuando comenzaban los safaris.

Obviamente durante la segunda etapa del viaje, las temperaturas que sufrimos no tuvieron nada que ver. A los pies del Himalaya y a altitudes superiores a los 4000 metros, nos encontramos continuamente a temperaturas bajo 0.

A pesar de que los primeros días lució el sol, durante los últimos días sufrimos continuas nevadas y bastante frío. Exactamente no sabemos a cuántos grados estuvimos porque no había ningún termómetro pero los pronósticos de nuestros teléfonos anunciaban temperaturas de entre -8 y -20ºC.

ALOJAMIENTOS

Desconocemos los precios de los alojamientos por los que pasamos porque estaban incluidos en el tour pero resultaron acogedores, cómodos y de agradable trato por parte de sus empleados.

Las comidas eran tipo buffet, bastante variados y abundantes aunque para alguien que no disfruta con las especias como yo, no podría decir que resultaran deliciosos. Pero en fin, el resto del grupo los disfrutó bastante. Cuestión de gustos.... 

SANIDAD

Acudimos al centro de vacunación internacional para que nos asesoraran acerca de las vacunas y recomendaciones a seguir pero finalmente no tuvimos que tomar ninguna vacuna ni medicación. Al parecer las zonas que visitamos eran de riesgo bajo de malaria y la única que nos recomendaron fue la de las fiebres tifoideas, que casualmente la teníamos de nuestro anterior viaje.

Por supuesto, beber siempre agua embotellada y comer en sitios con ciertas garantías.

IDIOMA

En India se hablan muchísimos idiomas pero entre ellos se encuentra el inglés, lo que facilita la comunicación aunque a decir verdad, con mi básico inglés, apenas entendía nada.

DINERO

Además de varias tarjetas, llevamos algo de dinero en efectivo. Cambiamos en Khan Market, en unos puestos donde anunciaban " Money Change ". Habíamos leído que allí se podía conseguir un cambio bastante favorable y la verdad es que, pese a que se trataban de pequeñas casetas de madera que no ofrecían demasiada confianza, nos dieron un cambio incluso por encima del oficial.

En el aeropuerto, donde tuvimos que cambiar algo de dinero los últimos días, el cambio fue muy malo. 

Khan Market

TELEFONOS Y COBERTURAS

Intentamos comprar una SIM local para poder hacer llamadas y tener internet pero no fuimos capaces ya que nos pedían un documento de identidad indio para registrarnos. Más tarde nos dijeron que acudiendo a una tienda de telefonía, con el pasaporte se podía conseguir.

De todas formas, durante los safaris no teníamos tiempo de mirar el teléfono y una vez en el hotel contábamos con wifi.

Por otro lado, la mayoría de SIM tampoco nos valdrían en Ladakh por lo que nos conformamos con conectarnos en los hoteles.

Tan sólo en Ulley, permanecimos una semana totalmente desconectados del mundo ya que allí no teníamos wifi. Nada grave...

ENCHUFES

A pesar de que el tipo de enchufes es distinto al nuestro, en todos los hoteles pudimos conectar nuestros enchufes sin problema ya que parecían estar adaptados.

NIVEL DE VIDA Y GASTRONOMIA

El nivel de vida en India es bastante asequible para los turistas europeos aunque buscar un buen hotel en Delhi puede resultar bastante caro. Si no eres demasiado exigente puedes encontrar alojamientos locales bastante baratos aunque no tienen nada que ver con los hoteles turísticos.

Comer es muy barato si lo haces en restaurantes locales aunque es conveniente buscar un mínimo de higiene para evitar problemas estomacales. Comer en lugares turísticos es más caro aunque tampoco excesivos si no te metes en algún local de lujo.

Taxis y tuk tuks son baratos, al igual que Uber.

SEGURIDAD

Es la tercera vez que visito India y una vez más no tuve ningún problema ni sentí ninguna amenaza en ningún momento. De cualquier forma, como digo siempre, hay que ser cauto cuando te mueves por ciudades desconocidas y guardar las mínimas precauciones que se deben tomar en cualquier lugar del mundo sobre todo en las grandes ciudades y al anochecer.

Eso sí, la falta de respeto por no guardar colas y esperar su turno a ser atendidos de muchos indidos, me ha llegado a superar en muchos momentos. Lo más curioso es que parecía no molestar a nadie así que ármate de paciencia y cuenta hasta diez antes de protestar. Por lo visto allí se funciona así....

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