DATOS UTILES DE LA JORNADA
- Siguiendo con nuestro recorrido en sentido contrario a las agujas del reloj, hoy nos desplazaremos desde Hofn hasta los fiordos del este, más concretamente hasta la localidad de Reyðarfjörður donde pasaremos la noche. Haremos un total de 240kms.
- Generalmente durante esta etapa la gente suele alojarse en Egilsstaðir, localidad principal de la zona, pero dado que encontramos una casa muy barata y con buena pinta a unos 30 kms de allí, no dudamos en reservarla. Fue todo un acierto ya que la casa resultó espectacular y además la más barata del viaje. Pagaremos 135€ por noche en este gran apartamento reservado por airbnb.
- Durante la etapa de hoy tenemos previstas varias paradas hasta llegar a los fiordos del este pero desconocíamos que el tiempo iba a deslucir mucho la jornada. Aún así destacaré los siguientes puntos:
- Stafafell Nature Park
- Hvalnes
- Lækjavik
- Djúpivogur
- Cascada Nykurhylsfoss (Sveinsstekksfoss)
- Túnel Reyðarfjörður
- Reyðarfjörður
Tras dar la vuelta completa a la isla, posiblemente ésta sea la etapa más floja de todas las que realizamos aunque esta afirmación no esté basada en la falta de lugares y paisajes espectaculares sino en nuestra experiencia personal que se vio fatalmente afectada por las inclemencias climatológicas que una vez más nos impidieron disfrutar de la zona como hubiéramos deseado. En fin, es algo para lo que hay que venir preparado a Islandia aunque tenemos que reconocer que el clima no nos está acompañando en los últimos días.
Ruta DE LA JORNADA
DIARIO DE LA JORNADA
Durante toda la noche, el viento no ha parado de balancear nuestra pequeña cabaña con increíble facilidad. En varios momentos hasta he temido que se la llevara, tras hacerla vibrar como si fuera una lavadora. Si el tiempo continúa así, nos iba a condicionar bastante las visitas planificadas.
Una vez más, Islandia se nos mostraba con toda su crudeza. Por si los efectos del viento sobre nuestra cabaña no fueran suficientes, el inconfundible sonido de la lluvia sobre nuestro tejado comenzó a dejarse oír claramente a las 6 de la mañana.
A las 7,30 nos levantamos para comprobar desesperados cómo la lluvia y el viento se disputan el protagonismo del nuevo día que acaba de comenzar. Desayunamos mientras vemos pasar las densas cortinas de agua a través de nuestra ventana.
No hay elección, debemos cargar el coche con todo el equipaje y abandonar esta zona en busca de vientos más favorables.
Cuando finalmente entramos todos al coche tras cargar el maletero y el cofre, ya estábamos totalmente empapados.
La tónica del viaje hasta el primer punto previsto discurrió como todos estos últimos días. Agua, viento y niebla a partes iguales….
Stafafell nature park
La primera visita la teníamos planificada en este parque donde las coloridas montañas de riolita esconden excelentes rutas y senderos. Teníamos la intención de dar algún pequeño paseo por la zona aunque tampoco podíamos extendernos demasiado ya que queríamos visitar otros puntos a lo largo de la ruta. Es ésta una buena zona de senderismo donde se pueden encontrar rutas de varios días de duración y donde, en ocasiones, se avistan rebaños de renos salvajes.
Hemos recorrido unos 35 kms desde Hofn pero cuando llegamos a las puertas del parque, decidimos por unanimidad que era absurdo hacer una parada allí. Llovía, el viento soplaba con rabia y la niebla impedía ver nada, más allá de 100 metros. Pillar otra mojadura para no ver nada, no merecía la pena.
Hvalnes
La zona de Hvalnes cuenta con varios atractivos. Su alargada playa de piedras flanqueada por bellas montañas, un llamativo faro de color anaranjado y una reserva natural, con curiosas especies tanto vegetales como avícolas, son suficientes razones para hacer una parada en sus inmediaciones. Aunque no es época de frailecillos, teníamos esperanzas de ver algún cisne cantor en las lagunas interiores.
Tuvimos que avanzar unos 15 kms desde la anterior parada para llegar a esta zona donde se intuían unos preciosos paisajes que en esta ocasión no pudimos disfrutar debido a la niebla reinante. Así todo pudimos disfrutar de un grupo de cisnes cantores en una pequeña laguna.
Lækjavik
Tras pasar por el faro de Hvalnes, donde desde el coche conseguimos ver alcatraces, fulmares y pardelas, seguimos la carretera principal bordeando el mar hasta llegar a otra bonita playa negra con una curiosa roca en medio de su arena. A medio camino hacemos una breve parada en un mirador al borde de la carretera para disfrutar lo que nos permite la niebla de la mañana. Apenas hay 10 kms desde el punto anterior.
Parece que la lluvia amaina y no desaprovechamos la ocasión para salir del coche y estirar las piernas dando un pequeño paseo por una salvaje playa de rocas negras, inmersos en el árido y desértico paisaje. La tregua no dura mucho y la lluvia comienza a caer de nuevo con fuerza. De nuevo al coche.
djupivogur
Avanzamos unos 45 kms para llegar a Djúpivogur, una población de la región de Austurland, al este de Islandia, cuya población apenas llega a los 500 habitantes.
En esta localidad podemos encontrar una curiosa obra artística que consta de 34 huevos que representan a cada una de las aves que puedes encontrar en esta zona. La obra conocida como Eggin í Gleðivík, fue creada por el escultor islandés Sigurð Guðmundsson en 2009.
La lluvia parece amainar de nuevo por lo que salimos del coche para dar una vueltita por el pueblo antes de seguir nuestra ruta. Los eideres comunes chapotean entre las olas ajenos al mal tiempo
Nykurhylsfoss (Sveinsstekksfoss)
Seguimos la ruta hacia el norte recorriendo el fiordo Berufjörður hasta llegar, tras unos 15 kms, a la cascada de Nykurhylsfoss (Sveinsstekksfoss).
No se trata esta cascada de una de las más espectaculares de Islandia, ni mucho menos pero las vistas y el entorno que la rodean, bien merecen una parada si no vas apurado de tiempo. Tras ver desde el mirador, esta caída de 15 metros, seguimos unos kms por la carretera y conseguimos ver unos renos salvajes pastando en unas campas cercanas. La lluvia había parado y había que aprovechar esos momentos.
Túnel Reyðarfjörður
Recorremos cerca de 100 kms hasta llegar a un largo túnel que nos lleva hasta el comienzo del fiordo Reyðarfjörður. Antes de llegar hasta aquí hemos seguido la carretera que recorre los fiordos Stöðvarfjörður y Fáskrúðsfjörður pero desafortunadamente, no hemos podido disfrutar del paisaje demasiado, a causa de la densa niebla que invade toda la zona.
El trayecto del túnel de Reyðarfjörður, de casi 6 kms de largo, atraviesa la montaña, evitando un pesado y largo rodeo. Desde 2005, año de construcción de esta importante obra, todo vehículo procedente del sur, consigue llegar cómodamente a la localidad de Reyðarfjörður.
Reyðarfjörður
Una vez atravesado el túnel, llegamos a nuestro destino final. Hoy nos alojaremos en esta localidad, ubicada donde comienza el fiordo oriental más largo ( 30 kms ) y ancho de la zona. Esta localidad cuenta con una población de casi 1500 habitantes y se erige como una de las más importantes de la zona. Gran parte de su economía gira alrededor de una importante fundición de aluminio cecana.
Hemos recorrido 240 kms desde que salimos de Hofn esta mañana y a pesar de que no podemos calificar la jornada como extraordinaria debido a las horribles condiciones climatológicas que hemos sufrido, hemos disfrutado todo lo que hemos podido. No nos queda más remedio que confiar en que el tiempo cambie algún día...
Gracias al trabajo realizado antes de llegar, teníamos perfectamente localizada la casa donde íbamos a dormir las dos próximas noches y nuestro GPS nos llevó hasta la misma puerta. La ya típica cajita de seguridad que contenía las llaves del apartamento, se encontraba junto a la puerta de entrada. Metimos la clave y sacamos las llaves.
La casa es enorme y está decorada con muy buen gusto. También cuenta con un gran garaje donde podemos meter nuestro coche. Una cocina, un gran salón, tres habitaciones, un baño y una amplia terraza con barbacoa, completan nuestra mansión.
Será esta uno de los mejores alojamientos del viaje y curiosamente el más barato. Pagaremos 135€ por noche y lo reservamos por airbnb. Poco más de 20€ por persona.
Como únicas objecciones diré que nos resultó un poco costoso dar con el extraño método para cerrar las puertas y encender la vitrocerámica.
Mientras unos organizábamos equipajes y los repartíamos por las habitaciones, otros se acercaron al pueblo para hacer algunas compras para cenar.
Hoy comenzaban, según una aplicación que habíamos bajado a nuestros móviles, unos días con una actividad solar excepcional o lo que es lo mismo, la posibilidad de ver auroras boreales iba a ser muy elevada a partir de esta noche.
Desde las ventanas de casa no dejábamos de explorar el cielo en busca de alguna señal pero la abundante y densa nubosidad se encargaba de echar por tierra nuestras ilusiones de inmediato. Esto iba a resultar muy complicado...
Nuestros compañeros no tardaron en llegar con las provisiones. El frío y el mal tiempo nos habían abierto el apetito y devoramos con pasión unas ensaladas de tomate, unos pollos asados y unos huevos fritos con patatas y pimientos rojos. Unas botellitas de vino rico y un gran tarro de helado pusieron el colofón a un día no demasiado brillante pero que con la tripa bien llena, comenzábamos a ver de otra manera.
Mañana seguro que mejorará el clima.....
Capítulo anterior: Hofn. Jökulsárlón, Fjallsárlón y Playa de los Diamantes.
La tónica del viaje hasta el primer punto previsto discurrió como todos estos últimos días. Agua, viento y niebla a partes iguales….
Stafafell nature park
La primera visita la teníamos planificada en este parque donde las coloridas montañas de riolita esconden excelentes rutas y senderos. Teníamos la intención de dar algún pequeño paseo por la zona aunque tampoco podíamos extendernos demasiado ya que queríamos visitar otros puntos a lo largo de la ruta. Es ésta una buena zona de senderismo donde se pueden encontrar rutas de varios días de duración y donde, en ocasiones, se avistan rebaños de renos salvajes.
Hemos recorrido unos 35 kms desde Hofn pero cuando llegamos a las puertas del parque, decidimos por unanimidad que era absurdo hacer una parada allí. Llovía, el viento soplaba con rabia y la niebla impedía ver nada, más allá de 100 metros. Pillar otra mojadura para no ver nada, no merecía la pena.
Hvalnes
La zona de Hvalnes cuenta con varios atractivos. Su alargada playa de piedras flanqueada por bellas montañas, un llamativo faro de color anaranjado y una reserva natural, con curiosas especies tanto vegetales como avícolas, son suficientes razones para hacer una parada en sus inmediaciones. Aunque no es época de frailecillos, teníamos esperanzas de ver algún cisne cantor en las lagunas interiores.
Tuvimos que avanzar unos 15 kms desde la anterior parada para llegar a esta zona donde se intuían unos preciosos paisajes que en esta ocasión no pudimos disfrutar debido a la niebla reinante. Así todo pudimos disfrutar de un grupo de cisnes cantores en una pequeña laguna.
Lækjavik
Tras pasar por el faro de Hvalnes, donde desde el coche conseguimos ver alcatraces, fulmares y pardelas, seguimos la carretera principal bordeando el mar hasta llegar a otra bonita playa negra con una curiosa roca en medio de su arena. A medio camino hacemos una breve parada en un mirador al borde de la carretera para disfrutar lo que nos permite la niebla de la mañana. Apenas hay 10 kms desde el punto anterior.
Parece que la lluvia amaina y no desaprovechamos la ocasión para salir del coche y estirar las piernas dando un pequeño paseo por una salvaje playa de rocas negras, inmersos en el árido y desértico paisaje. La tregua no dura mucho y la lluvia comienza a caer de nuevo con fuerza. De nuevo al coche.
djupivogur
Avanzamos unos 45 kms para llegar a Djúpivogur, una población de la región de Austurland, al este de Islandia, cuya población apenas llega a los 500 habitantes.
En esta localidad podemos encontrar una curiosa obra artística que consta de 34 huevos que representan a cada una de las aves que puedes encontrar en esta zona. La obra conocida como Eggin í Gleðivík, fue creada por el escultor islandés Sigurð Guðmundsson en 2009.
La lluvia parece amainar de nuevo por lo que salimos del coche para dar una vueltita por el pueblo antes de seguir nuestra ruta. Los eideres comunes chapotean entre las olas ajenos al mal tiempo
Nykurhylsfoss (Sveinsstekksfoss)
Seguimos la ruta hacia el norte recorriendo el fiordo Berufjörður hasta llegar, tras unos 15 kms, a la cascada de Nykurhylsfoss (Sveinsstekksfoss).
No se trata esta cascada de una de las más espectaculares de Islandia, ni mucho menos pero las vistas y el entorno que la rodean, bien merecen una parada si no vas apurado de tiempo. Tras ver desde el mirador, esta caída de 15 metros, seguimos unos kms por la carretera y conseguimos ver unos renos salvajes pastando en unas campas cercanas. La lluvia había parado y había que aprovechar esos momentos.
Túnel Reyðarfjörður
Recorremos cerca de 100 kms hasta llegar a un largo túnel que nos lleva hasta el comienzo del fiordo Reyðarfjörður. Antes de llegar hasta aquí hemos seguido la carretera que recorre los fiordos Stöðvarfjörður y Fáskrúðsfjörður pero desafortunadamente, no hemos podido disfrutar del paisaje demasiado, a causa de la densa niebla que invade toda la zona.
El trayecto del túnel de Reyðarfjörður, de casi 6 kms de largo, atraviesa la montaña, evitando un pesado y largo rodeo. Desde 2005, año de construcción de esta importante obra, todo vehículo procedente del sur, consigue llegar cómodamente a la localidad de Reyðarfjörður.
Reyðarfjörður
Una vez atravesado el túnel, llegamos a nuestro destino final. Hoy nos alojaremos en esta localidad, ubicada donde comienza el fiordo oriental más largo ( 30 kms ) y ancho de la zona. Esta localidad cuenta con una población de casi 1500 habitantes y se erige como una de las más importantes de la zona. Gran parte de su economía gira alrededor de una importante fundición de aluminio cecana.
Hemos recorrido 240 kms desde que salimos de Hofn esta mañana y a pesar de que no podemos calificar la jornada como extraordinaria debido a las horribles condiciones climatológicas que hemos sufrido, hemos disfrutado todo lo que hemos podido. No nos queda más remedio que confiar en que el tiempo cambie algún día...
Gracias al trabajo realizado antes de llegar, teníamos perfectamente localizada la casa donde íbamos a dormir las dos próximas noches y nuestro GPS nos llevó hasta la misma puerta. La ya típica cajita de seguridad que contenía las llaves del apartamento, se encontraba junto a la puerta de entrada. Metimos la clave y sacamos las llaves.
La casa es enorme y está decorada con muy buen gusto. También cuenta con un gran garaje donde podemos meter nuestro coche. Una cocina, un gran salón, tres habitaciones, un baño y una amplia terraza con barbacoa, completan nuestra mansión.
Será esta uno de los mejores alojamientos del viaje y curiosamente el más barato. Pagaremos 135€ por noche y lo reservamos por airbnb. Poco más de 20€ por persona.
Como únicas objecciones diré que nos resultó un poco costoso dar con el extraño método para cerrar las puertas y encender la vitrocerámica.
Mientras unos organizábamos equipajes y los repartíamos por las habitaciones, otros se acercaron al pueblo para hacer algunas compras para cenar.
Hoy comenzaban, según una aplicación que habíamos bajado a nuestros móviles, unos días con una actividad solar excepcional o lo que es lo mismo, la posibilidad de ver auroras boreales iba a ser muy elevada a partir de esta noche.
Desde las ventanas de casa no dejábamos de explorar el cielo en busca de alguna señal pero la abundante y densa nubosidad se encargaba de echar por tierra nuestras ilusiones de inmediato. Esto iba a resultar muy complicado...
Nuestros compañeros no tardaron en llegar con las provisiones. El frío y el mal tiempo nos habían abierto el apetito y devoramos con pasión unas ensaladas de tomate, unos pollos asados y unos huevos fritos con patatas y pimientos rojos. Unas botellitas de vino rico y un gran tarro de helado pusieron el colofón a un día no demasiado brillante pero que con la tripa bien llena, comenzábamos a ver de otra manera.
Mañana seguro que mejorará el clima.....
Capítulo anterior: Hofn. Jökulsárlón, Fjallsárlón y Playa de los Diamantes.
Capítulo siguiente: Los fiordos del este
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